Este ritual SRNS está pensado para pieles con signos de envejecimiento visibles: arrugas, flacidez, sequedad y manchas. La sinergia de Glyco 8‑Power, Vitamina C, Ceramidas y Ácido Hialurónico ofrece un efecto alisador inmediato en el contorno y progresivo en el rostro, mejorando textura, luminosidad y sostén. Con uso constante, la piel despierta más descansada y uniforme, con poros afinados y un tono visiblemente revitalizado, manteniendo un acabado sedoso propio de la alta cosmética.
Por la noche, aplica primero Repair Night Progress Eye con toques suaves desde el lagrimal a las sienes y bajo el arco de la ceja; continúa con 2–3 gotas de Repair Night Progress en rostro y cuello con pases ascendentes; finaliza con Crema Recuperadora Intensiva en rostro, cuello y escote mediante masaje envolvente. Por la mañana, puedes usar el contorno para revitalizar la mirada y sellar con una crema con SPF 30+. Si incorporas activos como retinol, alterna días y respeta la fotoprotección para preservar la barrera cutánea.
Sí, el pack convivirá bien con vitamina C por la mañana para potenciar luminosidad y tono uniforme. Por la noche, el retinol puede alternarse según tolerancia, aplicándolo antes de la crema y evitando sobre‑exfoliación cuando utilices ácidos; observa la piel y reduce frecuencia si notas sensibilidad. Los productos ya aportan ácido hialurónico y ceramidas; para piel muy seca, suma una esencia humectante antes del sérum. Siempre concluye la rutina diurna con protección solar para optimizar resultados antiedad.
Las fórmulas SRNS se caracterizan por texturas sedosas y fundentes de absorción rápida, con un acabado pulido, luminoso y confortable. El contorno en gel fresco alisa ópticamente y descongestiona la mirada; el booster deja la superficie más lisa y elástica sin residuo pesado; la crema aporta nutrición exquisita y confort prolongado ideal para sequedad extrema. El conjunto equilibra ciencia y placer táctil, ofreciendo la experiencia premium propia de la marca con una piel más jugosa y homogénea.
Los efectos de alisado y descanso en la mirada se perciben desde las primeras aplicaciones; la mejora en firmeza, textura y luminosidad se consolida a partir de las primeras semanas, gracias a la acción sincronizada día/noche del booster. Para mantener resultados, prioriza la constancia: rutina completa cada noche, protección solar cada mañana y ajuste estacional (más capas humectantes en invierno, texturas más ligeras en verano). Integrar hábitos como limpieza adecuada y evitar agresores ambientales refuerza la eficacia del ritual.